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domingo, 27 de septiembre de 2015

SIEMPRE PODAR LO QUE IMPIDE AMAR

El pasaje del Evangelio de hoy va de podar.


Nos invita a arrancar de nuestras vidas todo aquello que no nos sirva para amar o lo que nos impida hacerlo. Sea lo que sea. Con la ayuda de Jesús, será fácil descubrirlo y fácil el podarlo.
Jesús nos enseña a no creernos superiores, a no marginar a nadie de nadie, y nos invita a respetar y a favorecer la vida de todos con todos.
Todos contamos para Dios y todos deberíamos contar para todos. Así el mundo sería el hogar digno que Dios de siempre ha querido.
Y, ¿los milagros para poder lograrlo? Pues nada más y nada menos que nosotros mismos.


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