El pasaje del Evangelio de este domingo nos trae la eterna ambición de querer destacar y ser los primeros o los más importantes en todo, ¡¡hasta en la fila de entrar al Cole!!...
Pero también nos trae la respuesta que Jesús nos da: Ser los primeros o los más importantes no es cuestión de estar por encima de otros o antes que otros; es estar haciendo el bien allí donde se necesite o alguien nos necesite. La cuestión no está en ser "más que" o "el primero en", sino en amar y ayudar lo más posible y lo mejor posible, y siempre que podamos, a los más importantes de todos de verdad, que son aquellos que nos necesitan, y que muchas veces están en los últimos puestos de la fila, y no sólo del Cole, sino de la vida.
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